Facebook ha eliminado más de 1,5 millones de vídeos del
ataque en Nueva Zelanda en las primeras 24 horas tras el atentado, según ha informado Mia Garlick, directora de políticas de Facebook para Australia y Nueva Zelanda, citada en un tuit del servicio de prensa de la red social estadounidense. Según ha indicado, 1,2 millones de esos vídeos fueron bloqueados a la hora de subirlos. "Por respeto a las personas afectadas por la tragedia y las preocupaciones de las autoridades locales, también eliminamos todas las versiones editadas del video", ha señalado también Facebook.
Por otra parte, las autoridades de Nueva Zelanda tenían previsto comenzar a devolver hoy a los familiares los restos de algunos de los cincuenta fallecidos en el atentado de Christchurch, según la primera ministra. Familiares y representantes de la comunidad musulmana piden desde el sábado que se acelere esta entrega para poder efectuar los ritos funerarios de conformidad con su religión, que establece un plazo de unas 24 horas para enterrar a los fallecidos. "Los cuerpos van a comenzar a ser devueltos al final de la tarde. Será un pequeño número. Esperamos que todos los restos hayan sido devueltos el miércoles", declaró Ardern a la prensa en Wellington tras reunirse con la comunidad musulmana de la capital. Tanto el Gobierno como la policía neozelandesa han expresado su comprensión e interés en satisfacer esta demanda pero han pedido paciencia para que los forenses concluyan la identificación de los cadáveres.
Sobre el principal sospechoso y único imputado por ahora, el australiano Brenton Tarrant, de 28 años, Ardern informó de que se encuentra en una celda de máxima seguridad a la espera de comparecer de nuevo ante el juez el 5 de abril. La primera ministra dijo haber pedido consejo sobre una posible repatriación de Tarrant, imputado de momento con un cargo de asesinato, pero aseguró que tanto la acusación como el juicio tendrán lugar en Nueva Zelanda. El Gobierno neozelandés prevé reunirse mañana lunes, cuando recibirá un informe preliminar sobre el atentado y abordará las discusiones preliminares sobre políticas, incluida la de la reforma de la ley que regula la posesión de armas.
Ardern confirmó, además, que nueve minutos antes del asalto a la primera de las dos mezquitas atacadas, su oficina recibió por correo electrónico el manifiesto en el que Tarrant justificaba su acción, y que también fue enviado a otros 30 destinatarios, incluidos políticos, instituciones y medios de comunicación. Según la gobernante, el correo fue puesto en manos de responsables de seguridad dos minutos después de su recepción pero "no incluía ni el lugar ni datos específicos" sobre el ataque.
La primera ministra también dijo que mañana, en el primer día laborable de la semana, se reforzará la presencia policial en Christchurch, y que esta se mantendrá en las mezquitas de todo el país durante la celebración de plegarias. El comisionado de la Policía, Mike Bush, añadió poco después que a partir del lunes habrá una "alta presencia policial" en colegios, negocios, y locales de ocio en todo el territorio neozelandés "para que todo el mundo se sienta seguro en lo que tenga que hacer". Bush también defendió la rapidez de la respuesta al atentado por parte de la policía, que, según dijo, a los seis minutos del primer aviso ya tenía agentes en la zona, en diez minutos desplegó su escuadrón armado, y en 36 ya tenía al principal sospechoso bajo custodia.